miércoles, noviembre 15, 2006

 Cambiarán la imagen institucional de Mega Comercial en San Miguel
Por: Carlos García, Martes, 14 de Noviembre de 2006
Correo

Logran acuerdo representantes de la tienda con municipio
San Miguel de Allende

Representantes de la tienda Mega Comercial Mexicana se reunieron con funcionarios del gobierno de San Miguel de Allende y se comprometieron a que en unos ocho días darán una respuesta si modifican su imagen institucional de acuerdo al estilo colonial de la ciudad y como lo estipula el Reglamento de Anuncios.

El 29 de noviembre la Comercial Mexicana será inaugurada pero la tienda de auto servicio y su imagen institucional rompe con la arquitectura colonial de San Miguel de Allende además de que violan los reglamentos de Construcción y de Anuncios.

Ayer el director de Desarrollo Urbano, de Protección Civil, de Tránsito y del Sistema de Agua se reunieron con el representante jurídico y gerente de la Comercial Mexicana para tocar temas relacionados con cada área.

“Lo de la imagen urbana se planteó y se les hizo hincapié, insistiendo del tema, que platicaran esto con los ejecutivos para ver qué modificaciones se pueden hacer con la imagen urbana”, mencionó el director de Desarrollo Urbano, Ángel Gastelum.

Se les planteó que se quitara el color naranja brillante y que la imagen institucional se ajuste a los tamaños y materiales que marca el Reglamento de Anuncios; “quedaron formalmente de darnos una respuesta en el transcurso de la semana”, dijo el funcionario.

Agregó que los representantes de la tienda insistieron en la colocación de una paleta publicitaria, pero ésta no fue autorizada porque también va en contra de los reglamentos correspondientes.

“Esperemos que nos echen la mano, como te comento, los colores fueron autorizados, tienen una licencia por la administración pasada y nosotros lo único que pedimos es que se reconsidere el cambio”, expuso finalmente el funcionario municipal.

Diputados no aprobarán cobro de estacionamiento en SMA
Por: Carlos García, Miércoles, 15 de Noviembre de 2006
Correo


SAN MIGUEL DE ALLENDE

Diputados del PRD, PVEM y PRI adelantaron que no aprobarán el apartado de la Iniciativa de Ley de Ingresos del gobierno de San Miguel de Allende que establece cobros hasta 499 pesos al mes por estacionar vehículos en el centro histórico; por su parte legisladores del PAN comentaron que se tiene que analizar a fondo la propuesta para evitar que se privatice la vía pública.

El Ayuntamiento de Allende aprobó en el artículo 37 de la Iniciativa de Ley de Ingresos del 2007 cobrar 7.5 pesos "por estacionamiento en la vía pública municipal del centro histórico, por vehículo, por hora o fracción que exceda los 15 minutos".

También marca que el ciudadano podrá comprar un tarjetón de uso permanente de parquímetro que tendrá un costo de 125 pesos por mes para el ciudadano que tenga un coche; 250 pesos "para el segundo vehículo del mismo propietario por mes" y 499 pesos "a partir del tercer vehículo de un mismo propietario por cada uno".

La Iniciativa de Ley establece que los dueños de motocicletas que se estacionen en la zona de parquímetros pagarán tres presos por hora. Hay que recordar que el director de Tránsito, Samuel Mercadillo, anunció que en unos seis meses se pretende poner parquímetros en todas las calles del centro histórico de Allende y de acuerdo con el Reglamento en la materia el Ayuntamiento definirá las vialidades y zonas donde se instalarán los aparatos; pero a propuesta del titular de Tránsito.

AL ANÁLISIS

"Los conceptos nuevos de recaudación se deben analizar muy bien, hay que ver qué tanto se atentaría contra los derechos de las personas que viven en el centro....lo veo difícil que se apruebe a la primera, se tendrá qué analizar y hacer las adecuaciones que correspondan", señaló el diputado del PAN, Salvador Márquez Lozornio.

Es posible que las Comisiones Unidas de Hacienda y Gobernación lleguen a citar a un representante del Ayuntamiento de Allende para que justifique los cobros por estacionamiento, "si nos convencen se aprueba, si no nos convencen y no justifican se rechaza, se corrige, la facultad de dictaminar es de los diputados", adelantó, el legislador.

Para la diputada del PAN Mayra Enríquez Vanderkam es legal la colocación de parquímetros; pero "se tiene que buscar generalizar el uso del servicio y buscar los mecanismos para que no pareciera que se está privatizando la vía pública", porque todos los ciudadanos tienen el derecho de estacionarse en el centro.

NO PASAN

La iniciativa de Ley de Ingresos de San Miguel de Allende en el apartado del cobro por estacionarse en el centro histórico sólo tiene fines recaudatorios "que lacera la economía de los ciudadanos", por eso la fracción parlametaria del PRI en el Congreso no avalará la contribución por ese derecho, adelantó la diputada Yulma Rocha Aguilar.

Por su parte, el legislador del PRD, Arnulfo Montes de la Vega, señaló que "el grueso de la gente de San Miguel de Allende no tiene para hacer esos pagos, y con este tipo de cobros alejarían al turismo...el PAN tiene una mayoría que puede permitir que se hagan todas las tonterías que se le vengan en mente".

Al igual que los legisladores del PRI y del PRD, el diputado del PVEM, Luis Alberto Camarena Rougón, coincidió en que no aprobará los cobros que quiere hacer el Ayuntamiento de Allende a la población que estacione sus vehículos en el centro histórico.

Los parquímetros "representan un impacto visual para una ciudad turística, sería muy mal esa barrera visual de parquímetros por muy bonitos que los pongan...también sería negativo los cobros que les pegan a los bolsillos de la gente", concluyó el diputado del Verde Ecologista.

Descuida México turismo de jubilados
Por Mario López
Grupo Reforma


La infraestructura es insuficiente para atraer norteamericanos. Faltan hospitales y personal capacitado para este mercado, en principales destinos

Sólo 1.5 millones de jubilados de Canadá y Estados Unidos, de un universo de 7.2 millones, viajan a México en calidad de turistas, principalmente a la zona fronteriza, debido a que el resto del País no cuenta con la infraestructura y servicios adecuados para viajeros de esa edad.

De los retirados estadounidenses que viajan al extranjero, sólo 17 por ciento visita México, mientras que de los canadienses apenas el 7 por ciento, según un estudio de la Secretaría de Turismo.

La falta de infraestructura médica especializada, de servicios a campamentos, de promoción y ciertos trámites migratorios y de ingreso de vehículos para turistas que viajan en caravana hacen que México pierda la oportunidad de atraer más turistas jubilados de sus vecinos del norte.

Thierry Baurez, director de Ventas Internacionales de Hoteles Camino Real, dijo que, a excepción de Cancún, en la mayoría de las playas faltan servicios hospitalarios de primer nivel especializados en geriatría y atención a mayores de 60 años, como es el caso de Puerto Vallarta, Manzanillo y Mazatlán, donde las clínicas que hay son del sector salud o no cuentan con esta especialidad.

"Las personas jubiladas requieren atención especializada, y a pesar de que en los hoteles se cuenta con un médico éste ofrece servicios generales y no especialidades", expresó.

México tiene buen potencial en estados del norte, como Baja California y Baja California Sur, pero en el interior del País falta infraestructura y servicios especializados de calidad, agregó.

Por ejemplo, relató, a los jubilados de EU les gusta viajar en caravanas, pero México no cuenta con suficientes trailer parks con servicios para baño, luz, agua, entre otros.

Beatriz Arellano, encargada de información de la Asociación Mexicana de Acampadores, expuso que la mayoría de los trailer parks se concentran en el noreste del País, donde se encuentra el 63 por ciento de esta infraestructura.

Los trámites también son un problema para estos visitantes.

Estos turistas que viajan en caravanas deben tramitar la importación temporal de sus vehículos, y si quieren hacer estancias largas, como lo prefieren muchos jubilados, la tramitación de las visas se complica, dice el estudio.

"Para ampliar la estadía de los retirados extranjeros sería recomendable facilitar el proceso de tramitación de visas por una de mayor duración a seis meses", dice el estudio.

Incluso Baja California, que es el destino preferido de los turistas jubilados de Norteamérica, detectó cuando menos cinco deficiencias en este sector.

"Falta personal capacitado para dar atención a personas de la tercera edad, falta planeación y orden en la ubicación de destinos, faltan estándares de calidad y medidas de seguridad y una definición de una estrategia de promoción", dice el documento Baja California Visión 2025.

José Jové Dueñas, ex presidente de la cadena de hoteles Hilton en México, explicó que es un sector que no se ha explotado mucho.

"Sería un nicho de mercado importante porque no sólo es la derrama turística, sino la derrama cultural... Actualmente no hay un hotel, una agencia de viajes o promotores que impulsen este nicho de mercado propiamente".

Hay un buen mercado y ciudades como Ajijic, Chapala, Guadalajara, en Jalisco, y San Miguel Allende, Guanajuato, pero falta aprovechar más este mercado, dijo Jové Dueñas.
El andariego
Por Sergio Aguayo Quezada
Grupo Reforma


A Vicente Fox le apasiona viajar y no lo oculta, ni se avergüenza. Parafraseándolo, ¿y a nosotros qué?

Se enojó. El Presidente se enfureció porque los diputados le prohibieron irse por 10 días a Australia y Vietnam. Para curar la muina regaló una cadena nacional para despotricar contra las minorías "oportunistas" que lo habían "secuestrado" sin razón. El incidente podría engarzarse a la comedia de despropósitos y declaraciones lamentables de este final de sexenio. Puede también verse como parte de un estilo de gobernar que vale la pena entender.

Tengo ya un par de años reuniendo información para un libro sobre la democracia mexicana y sus males, que publicará Taurus el próximo año. Desde el primer armado de los capítulos dedicados a este sexenio me sorprendió la cantidad de kilómetros recorridos por Vicente Fox; es el Presidente más viajado en la historia nacional. Él mismo precisó, "cuatro días a la semana viajo, estoy fuera del escritorio... lo he venido haciendo desde el primer día de gobierno y lo voy a seguir haciendo hasta el último", (Reforma, 21 de febrero del 2006).

¿De dónde nace, y qué consecuencias tiene, esa compulsión viajera? Para su ex secretario particular, Alfonso Durazo, se trata de "un activismo sin dirección, empujado sólo por la necesidad de estar en movimiento, para dar la sensación de dinamismo" (Saldos del cambio, Plaza y Janés). Viéndolo desde otra perspectiva, viajar ha sido, para Fox, una manera de huir de una realidad que le choca porque lo confronta con situaciones desagradables y decisiones difíciles.

Vicente Fox ganó la elección presentándose como un estadista dispuesto a tomar riesgos para transformar México. Muy pronto le salió la personalidad insegura, dio marcha atrás y puso sus lealtades al servicio del orden establecido. Ayudaron los halagos y aclaraciones de los representantes de los intereses creados que le recordaron que triunfar en las elecciones no significaba obtener el poder. Quienes esperábamos reformas empezamos a criticarlo muy pronto porque en el 2001 se hizo evidente la capitulación. Para entender la reacción habría que sumar a las condenas la hostilidad y el desdén capitalinos hacia quienes llegan del interior.

Como Fox siempre se ha visto como un campeón de la democracia (y piensa tener el título a perpetuidad por haber derrotado al PRI en las urnas), reaccionó descalificando o ignorando a sus críticos; de entonces viene su animadversión al "círculo rojo". El Presidente también protegió su autoestima con un doble mecanismo. El primero fue refugiándose en un círculo íntimo en donde se colocaron como porteros Marta Sahagún y Ramón Muñoz. El segundo fue a través de esas giras nacionales e internacionales meticulosamente planificadas por un Estado Mayor Presidencial que deja poco, casi nada, al azar. Son ambientes controlados donde todo funciona a la perfección, como si no fuera México.

El Presidente deja Los Pinos en un helicóptero que lo deposita en la escalinata de un avión siempre listo para despegar. En la parte delantera de éste se respira un aire relajado porque los invitados conversan en voz baja sintiéndose parte -lo son- de un club muy exclusivo. Entre susurros se intercambian chismes, hacen negocios o tejen jugadas políticas; ocasionalmente se entretienen buscando la conversación informada del intelectual o el periodista invitado. Los asientos son amplios y entre comidas el antojadizo puede solicitar alguna de las tortas que han dado fama a la cocina del avión presidencial. Cuando se llega al destino ya está esperando otro helicóptero o la caravana de autos que trasladan a la comitiva por vialidades siempre libres. Los lugareños están contentos porque generalmente se inauguran obras o cumplen promesas y aplauden, por entusiasmo o inercia, al mandatario que los visita. Los sobresaltos o sorpresas son la excepción.

Fox se comporta como el mandatario bonachón siempre dispuesto a platicar los logros de su gobierno porque está convencido de que mientras viaja por este "México maravilloso", su gabinetazo está implementando las transformaciones y resolviendo las crisis en la casi siempre contaminada y revoltosa capital. Esta creencia la desarrolla Ramón Muñoz en un par de libros donde se asegura que concediendo autonomía a los funcionarios se libera su energía creativa.

Otra forma de verlo es que cuando Fox delegó funciones a su heterogéneo gabinete, éste reaccionó como una orquesta sin director; en estos seis años cada secretario o funcionario ha tocado la melodía de su elección. El resultado es desigual, con puntos brillantes y fiascos deslumbrantes. El Presidente lo minimiza y se declara satisfecho porque, después de todo, su equipo lo quiere, o dice quererlo, y él necesita dosis masivas de aceptación y afecto.

Los viajes han acercado al Presidente a sus gobernados que, sin embargo, tienen claridad sobre su estilo de gobernar. El resultado es una opinión pública que lo aprueba y condena, al mismo tiempo. La serie de encuestas levantadas por Mitofsky durante el sexenio muestra una tasa de aprobación de Fox en torno al 60 por ciento, cifra que se derrumba ¡cuarenta puntos! cuando se juzga su "capacidad para resolver problemas" y su "liderazgo para dirigir al país".

Termina el primer sexenio de la alternancia y puede concluirse que cuando Fox era candidato se vendió como estadista, pero no cumplió. Al entrar en Los Pinos se convirtió en un gerente honesto, platicador y andariego al que le salió la personalidad insegura y se atrincheró en su círculo íntimo y en el ambiente aséptico de la gira perpetua. Cuando le interrumpieron su último periplo transcontinental reaccionó con el berrinche y las tonterías.

¿Y nosotros qué? Muy poco se puede hacer porque la democracia da margen a la simulación o la frivolidad y parecería difícil que el Instituto Federal Electoral contrate un pelotón de psicoanalistas que dictaminen sobre el inconsciente de los aspirantes a gobernarnos. Tampoco podemos recurrir a métodos excepcionales como el gobierno tibetano en el que, el exilio tiene a un oráculo oficial que consulta el Dalai Lama sobre los asuntos más serios.

Nuestro único refugio está en la crítica razonada y sobre el capítulo aquí discutido me permito expresar mi desencanto y escepticismo sobre los beneficios para el país del activismo desenfrenado del Presidente que, una vez elegido, se quitó las botas para ponerse las pantuflas de descanso.

Correo electrónico: sergioaguayo@infosel.net.mx