sábado, abril 14, 2007

Generan desigualdad elites que tienen "capturada la actividad económica", afirma
Banco Mundial: los monopolios, fardo para la economía mexicana

Identifica como tales a telecomunicaciones, minería, banca, comercio, tv e industria de la tortilla

En el caso del petróleo, "el punto no es privatizar", sino cómo manejar mejor los hidrocarburos

ROBERTO GONZALEZ AMADOR , DAVID BROOKS ENVIADO , CORRESPONSAL
La Jornada

Washington, DC, 13 de abril. El Banco Mundial aseguró este viernes que "las elites que tienen capturada" la actividad económica en México son una de las causas de que la inequidad en el país sea extendida. "Los monopolios rompen la posibilidad de desarrollo" y de un crecimiento con mayor igualdad, dijo Francois Bourguignon, vicepresidente del organismo, en referencia específica al caso mexicano.

Para el funcionario del organismo multilateral, son un fardo para la actividad económica los monopolios privados y también los que existen por mandato de la Constitución en el sector energético.

Una de las causas de la extendida desigualdad en México, expuso Bourguignon, "es la existencia de monopolios de personas y empresas". Estas prácticas, abundó, "desaceleran el crecimiento y generan más desigualdad".

"Afectan por igual los monopolios privados y los públicos, como el que existe en el petróleo", añadió. Petróleos Mexicanos (Pemex), la empresa estatal, no invierte y eso hace que aumenten los costos de los energéticos. "El punto no es privatizar, sino cómo manejar mejor los recursos petroleros", dijo.

Datos oficiales del gobierno mexicano establecen que 20 por ciento de los hogares más ricos del país concentran 52.5 por ciento del ingreso nacional, mientras que el 20 por ciento más pobre apenas obtiene 4.5 por ciento del ingreso total. América Latina y el Caribe es la región con mayor desigualdad en el mundo en desarrollo, y, en el contexto latinoamericano, México es de las economías con mayor grado de concentración de la renta.

El punto de la desigualdad fue abordado por Francois Bourguignon este viernes, al presentar un reporte del avance en el cumplimiento de las Metas del Desarrollo del Milenio (MDM), un conjunto de objetivos planteados por Naciones Unidas para reducir a la mitad la pobreza en el mundo entre 1995 y 2015, así como a mejorar el acceso de los pobres a educación, salud, servicios y abatir la desigualdad de género. El informe fue presentado en el marco de la reunión anual de primavera del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, que concluirá el domingo.

Comentó que México se encuentra "aparentemente" a la zaga en el cumplimiento de los objetivos de abatir la mortalidad infantil para que en 2015 sea dos terceras partes más baja que la prevaleciente en 1995. En cambio, añadió, el país cumplirá la meta de acceso de los niños a la educación y, en cuanto al abatimiento de la pobreza, logrará también el objetivo.

Pero destacó otro aspecto que muestra la sociedad mexicana y que es el grado de desigualdad que prevalece.

"Hay muchas causas de la desigualdad", estableció. "Durante mucho tiempo los pobres no tuvieron acceso a servicios, a desarrollo humano e infraestructura que permitieran expresar su potencial económico. Esto generó mayor desigualdad y menor crecimiento".

Habló de "otro elemento de la desigualdad, que se da en el otro extremo" de la escala social.

"Es la existencia de monopolios, tanto monopolios de personas como de empresas, una práctica que desacelera el crecimiento y genera desigualdades en México", expuso el vicepresidente del Banco Mundial, quien también es el economista en jefe del organismo.

Bourguignon refirió que un estudio del Banco Mundial, elaborado en conjunto con la Universidad de Stanford, y que fue concluido en noviembre pasado, ha documentado la desigualdad asociada a la existencia de élites que se benefician de su poder político y económico.

Según ese estudio, "en la actualidad los grupos poderosos en México se benefician del status-quo y no tienen incentivos para cambiar su conducta. Hasta la fecha se ha observado un equilibrio político en el que estos grupos reciben rentas sustanciales a costa del dinamismo del crecimiento". Ese estudio se refiere en específico al sector de telecomunicaciones, minería, banca, industria cervecera, cemento, comercio, bienes raíces, televisión e industria de la tortilla.

En la conferencia de prensa de este viernes, Bourguignon consideró que el gobierno federal mexicano que inició su gestión el primero de diciembre pasado "está tomando en serio" el tema de los monopolios y busca reglamentarlos de manera más eficaz.

Insiste FMI en reforma al sector petrolero

Anoop Singh, responsable del área de América Latina en el Fondo Monetario Internacional (FMI), dijo que el gobierno mexicano ha establecido una estrategia "apropiada" para prevenir una eventual caída en los ingresos por la venta de petróleo, actividad que genera un tercio de los ingresos del Estado.

Insistió en que México debe avanzar en otra ronda de reformas de liberalización económica, "que involucre cambios en la política de competencia que traigan nuevas inversiones, fundamentalmente en el sector del petróleo".

"Esta es la agenda que creo que el gobierno ha abrazado", dijo Singh. "Creemos que el gobierno tiene un programa bien desarrollado para confrontar las reformas presupuestales"

miércoles, abril 11, 2007

"En México la democracia no es sinónimo de igualdad": Sartori

Considera que "sería un récord olímpico" que se logre en un año la reforma del Estado. Explica que antes las constituciones las elaboraban expertos; ahora los legisladores pretenden redactar las leyes fundamentales, lo que al menos en Latinoamérica ha sido "bastante terrible". Alerta que el sistema de elección por distrito provoca fragmentación y genera partidos minoritarios que sólo "chantajean" para obtener poder.

ANDREA MERLOS
El Universal
Miércoles 11 de abril de 2007

Giovanni Sartori puso en duda la promesa de los diputados y senadores mexicanos de concretar en un año la reforma del Estado -que incluiría cambios electorales de fondo-; lograrla "sería un récord y ameritaría una medalla olímpica".

"Las promesas son promesas; puedo prometer enviarles flores y estoy seguro que no lo haré. Hay mucha carne en el asador, no estoy convencido de algunas de las sugerencias (...); en su mayoría, las nuevas reformas de los últimos 30 años en Latinoamérica han sido peores que las anteriores. No es ley de la gravedad, es la ley de la decadencia humana", afirmó el politólogo italiano.

El autor de más de 30 de libros sobre teorías de la democracia, de la sociedad y del impacto de los medios, está en México para recibir de la UNAM el doctorado honoris causa, junto a personajes de la talla del escritor Fernando Savater y el ex presidente de Chile Ricardo Lagos.

En un coloquio convocado por EL UNIVERSAL en el noveno piso de la Torre de Rectoría en Ciudad Universitaria, GiovanniSartori externó sus puntos de vista frente a Mauricio Merino, Juan Francisco Escobedo y Rossana Fuentes-Berain, colaboradores de esta casa editorial.

El intelectual italiano alertó a México sobre la necesidad de regular la permanencia de los partidos políticos minoritarios dentro de la reforma del Estado, ya que éstos más que aportar a la democracia, "chantajean" para obtener poder.

A pregunta expresa de Merino sobre las posibilidades reales de concretar una reforma del Estado en México con base en la llamada ley Beltrones, Sartori explicó que las constituciones que son base de los sistemas de gobierno en todo el mundo fueron hechas por expertos, contrario a lo que sucede en estos días, en los que los legisladores pretenden erigirse como redactores de las leyes fundamentales de la sociedad.

"Tradicionalmente, las constituciones han sido elaboradas por expertos que luego van al Parlamento para que se aprueben y se obtenga una buena Constitución, tal como la mexicana de 1917, que era básicamente una buena Constitución.

"Ahora, los legisladores quieren hacer ellos mismos las constituciones, eventualmente con cierta ayuda, aunque tienen los objetivos en mente, pero también tienen grandes cosas en mente, como bienestar, salud y riqueza. Así que las constituciones recientes han sido, en Latinoamérica, bastante terribles. Un buen caso es la Constitución de Brasil, elaborada bajo Lula da Silva, quien ha sido acusado hasta de soborno, y si uno analiza su Constitución, se observa que está obligado a conseguir dinero para tener una mayoría", lanzó.

Con base en esta teoría, Sartori se confesó preocupado por lo que sucede en México y por el rumbo que puede tomar la constante alteración a la Carta Magna, en medio de la pugna por el poder y por la victoria electoral.

Sartori tiene 83 años porque así lo indican las matemáticas, pero en realidad es un hombre lúcido que recuerda cada teoría publicada en sus libros, que conoce los sistemas de gobierno del mundo, que narra con detalles la historia de la civilización y los sistemas de poder, que se atreve a ser crítico de su país, que sabe sonreír, y que rebasa las proporciones de ironía y sarcasmo.

Habla un perfecto inglés y entiende sin restricciones el español. Vestido con traje y corbata, escoltado por las banderas de México y de la UNAM, Sartori sostuvo que la democracia en México no es sinónimo de igualdad ni de equidad.

De ahí que la sociedad y los jóvenes, principalmente, no crean más en los políticos, en la clase política y en las decisiones políticas.

"Evidentemente escasean los buenos políticos y no podemos esperar milagros. Así que si un chivo es chivo, seguirá siendo un chivo (...); la idea es que en las elecciones debe haber una presión relacionada con el valor, es decir, que realmente se debe seleccionar y no sólo contar votos.

"Si examina todos los estudios electorales, no hay ni un solo estudio que diga qué hay con hacer una buena selección. La vieja disputa sobre la representación proporcional, sobre una representación igualitaria y equitativa ha desaparecido; y si no hay esa preocupación no hay nada", dijo.

Sartori también se pronunció por la reelección de legisladores en México con el único objetivo de evitar que el poder público se convierta en un modo de vida y se pierda el sentido del servicio.

"Yo sugiero reforzar sus poderes para hacer las cosas simples, reforzar el poder del Parlamento, lo cual sé que es impopular, pero ¿qué no es impopular? No me gusta el sistema electoral mixto que tienen porque no creo en la idea de que si se juntan una rana y una vaca se pueda obtener lo mejor de los dos mundos; lo que se tiene es una rana y una vaca", ironizó.

De ahí su teoría acerca de que la presencia de muchos partidos políticos, más que abonar a la pluralidad, se convierte en factor de negociación y de espacios de poder a costa del voto y de los recursos públicos.

El pensador italiano detalló que el sistema de elección por distrito no garantiza la competencia entre los partidos más arraigados, sino que provoca la fragmentación y multiplica los partidos.

"No veo el caso de tener un sistema que con el tiempo llevará a la fragmentación, y es que si un partido pequeño con 2% del voto aparece en escena, irá con el PRI o con el PAN o con alguno de los tres grandes, y dirá: ´Sé que no puedo ganar la elección, que no puedo ganar un asiento uninominal, pero puedo hacer que pierdas; así que o me das algunos lugares gratis en otros distritos o vas a perder ese asiento´. Eso es chantaje, simple y llanamente", señaló.

Legislar monopolios

El sociólogo y teórico europeo que hizo públicas sus diferencias con Silvio Berlusconi cuando éste fue candidato a la presidencia italiana, sostuvo que América Latina evidencia un atraso en la lucha contra los monopolios, a diferencia de algunos países europeos y de Estados Unidos en donde sus parlamentos han concretado reglas y normas que garantizan la competencia.

"Lo hemos visto en Inglaterra, al igual que en Estados Unidos y hasta cierto punto en Alemania y Francia; controlan esto de manera bastante decente y este es un problema que surge al tener un gobierno ineficiente", señaló.

"Entonces -dijo- todas estas cosas tienen que ver con intervenciones, las cuales evitan los monopolios, oligopolios y se puede luchar contra ellos".

Sartori consideró que el combate contra los monopolios tiene raíz en la lógica del desarrollo del capitalismo. "Me parece que en México hay una cohabitación muy cercana entre empresas privadas, gente adinerada y actores políticos. Todo el sistema es un conglomerado que de cierta manera es resultado del pasado porque el PRI fue un partido muy absorbente".

Así, en su paso por México, Sartori se confiesa "feliz" de recibir el honoris causa de la UNAM y asegura que hará a un lado "su hipocresía" para hacer pública su felicidad y agradecer su buena suerte. "Y si me quitan mi pasaporte italiano, entonces pediré uno mexicano".